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Beber de la niebla

iaguaLa escasez de agua que padecen muchos lugares del planeta, incluidas ciertas regiones deEspaña, hace que busquemos nuevas soluciones para abastecer a estas regiones y tomando como punto de partida prácticas ancestrales, innovemos y obtengamos soluciones tan ingeniosas como los captadores de lluvia.

Pero antes de pasar a describir el funcionamiento de estos sistemas y entender mejor los procesos que se desarrollan, comencemos por el principio: ¿qué es la niebla?

Las nieblas que se forman sobre tierra firme se conocen como nieblas por radiación, y el fenómeno que se produce es el siguiente: la tierra pierde parte de su calor por radiación durante la noche, especialmente con cielos despejados, y lo mismo le ocurre a las capas de aire cercanas a la superficie, quedando “atrapadas” entre la tierra y las capas de aire superiores que están más calientes, impidiendo su ascensión. El vapor de agua presente en esa capa más fría se condensa al llegar al punto de rocío, alrededor de los llamados núcleos de condensación, los cuales no son más que motas de polvo o de humo, formando pequeñas gotas que dan lugar a la aparición de la niebla. Estas nieblas suelen producirse en llanuras.

Sin embargo en zonas de montaña o con pendientes elevadas, la masa de aire, empujada por la ladera de barlovento, es decir aquella por donde viene el viento, asciende, disminuyendo su temperatura, y alcanzado el punto de rocío se produce nuevamente la condensación, dando lugar a la aparición de la niebla.

¿Cómo funcionan los captadores de lluvia?

Este sencillo sistema trata de imitar la captura de agua de niebla por medio de hojas de los árboles u otras especies.

Situado en zonas con pendientes, estratégicamente colocadas en dirección perpendicular al viento, las mallas de plástico interceptan la niebla, de modo que las gotitas se van acumulando y creciendo, cayendo finalmente por gravedad y siendo recogidas por una canaleta situada en la parte inferior. Posteriormente pasan a ser almacenadas en depósitos.

No deja de sorprender como tanta “sencillez” requiere sin embargo de experiencia y estudio.

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